Aunque Luis Aragonés es famoso por su carrera como entrenador, fue un jugador destacado en el Atlético de Madrid durante los años 60 y 70. Como mediapunta, Aragonés tenía una visión de juego excepcional y un talento para los goles decisivos. Sin embargo, su legado como jugador a menudo se ve eclipsado por su éxito en los banquillos, especialmente por su papel en la Eurocopa 2008.